Los residentes de Solimar Ollería nos muestran qué podemos hacer con cartulinas o folios de papeles de colores.
Desde botes para lápices a lámparas colgantes e incluso como fondo de verdaderas obras de arte.
Además de ser objetos útiles y decorativos para llenar de color la residencia y sus dormitorios hacen que ejercites su movilidad y socialicen entre ellos. Más que un pasatiempos es un momento para charlar entre ellos, hacer nuevas amistades y conversar sobre la vida…
Momentos llenos de color como los utensilios que usan para sus talleres.